El Excelentísimo y Reverendísimo Fray Jesús Sanz Montes, Obispo de Jaca y Huesca pregonó la Semana Santa de Jumilla, de la que afirmó que debe ser un punto de encuentro entre ‘la procesión interior y la procesión exterior’.

El pregonero fue presentado por el padre guardián del convento de Santa Ana Fray Francisco Oliver Alcón, puesto que Fray Jesús Sanz Montes también pertenece a la orden franciscana. El padre guardián, tras hacer un repaso por la trayectoria del pregonero, afirmó que “gracias a su docta preparación académica y sus dotes de comunicador, nos va a introducir en el alma de la Semana Santa jumillana que forma parte de la identidad de Jumilla”.

El acto tuvo lugar tras la Eucaristía presidida por el obispo y tuvo como escenario la Parroquia Mayor de Santiago con la presencia de los presidentes de todas las hermandades y cofradías, semanasanteros, representantes de colectivos y autoridades civiles y religiosas. En la Santa Misa actuó la Coral ‘Ars Nova’.

Antes de este pregón, el Obispo fue recibido por las autoridades locales en el Ayuntamiento de Jumilla donde firmó en el Libro de Honor.

El franciscano afirmó que el hecho de pregonar algo entraña un riesgo ya que, atendiendo a una de sus acepciones, se trata de “publicar o divulgar algo que se ignoraba, con lo que yo me pregunto ¿es que no saben ustedes lo que es la Semana Santa de Jumilla?, con lo que podría acabar ya mi pregón.

Dijo que más que autor, era oyente, “pregonero de una verdad, una belleza y una bondad”. El obispo de Huesca manifestó que “en Cuaresma volvemos a ponernos en camino, nos colocamos en la víspera de Semana Santa y no queremos que ese tiempo pase sin pena ni gloria, porque cada año hay una inflexión que es individual, porque no somos los mismos y detrás de los ojos que volverán a ver esas procesiones hay historias nuevas”. Afirmó que “en la procesión de la vida siempre hay pasos nuevos y en el centro anda Dios”. “La Semana Santa debe ser la oportunidad para cada uno de colocarse en esa procesión de la vida, debemos mirar esas escenas de las procesiones como una historia que se escribió pensando en nosotros, somos los destinatarios de ese bien”, dijo Fray Jesús Sanz Montes. Sobre esa historia indicó que “es una historia de amor, la más grande historia jamás contada, en Semana Santa nos volvemos a asomar a aquella semana vivida en directo por Jesús, aquella procesión primera que se verá plasmada hoy en nuestras calles”. El pregonero señaló que “mirando la procesión de Jesús, en la que entregó su vida, debemos entrar en nuestra propia procesión, una procesión interior donde procesiona toda la verdad y la mentira, el desencanto y la esperanza…”.

Tras el pregón, el presidente de la Junta Central de Hermandades José Carrión hizo entrega de una reproducción en plata del Cristo Amarrado a la Columna a Fray Jesús Sanz Montes como agradecimiento y recuerdo de este acto.