El concejal de Economía, Juan Gil, asegura que el Gobierno local sigue abierto al diálogo y que si hay alguna propuesta de técnicos externos al Ayuntamiento que garantice que es posible utilizar otras medidas no habría problema en presentar la propuesta de modificación
El concejal de Economía, Juan Gil, ha ofrecido una rueda de prensa en la que ha aclarado las dudas que se hayan podido generar y la postura del Ayuntamiento de Jumilla ante el comunicado emitido por la Asociación de Hosteleros sobre la Ordenanza de Ocupación de la Vía Pública con Mesas y Sillas.
Juan Gil ha manifestado que "desde el Gobierno local entendemos que no es necesaria la modificación de la ordenanza, ya que los aspectos que, según la Asociación de Hosteleros, presentan problemas pueden ser subsanados. En primer lugar y en cuanto a la distancia entre pilonas se refiere, presentando un certificado suscrito por un técnico competente que garantice las medidas de seguridad del vallado, cuando la distancia entre pilonas supere 1,5 metros. Por otro lado, en cuanto a la altura de los toldos no anclados al pavimento, esta dependerá en cada caso concreto de su situación con respecto al local".
El edil del área ha informado de que "a fecha de hoy la mayoría de establecimientos, más de un 80%, cumplen con la normativa, tienen sus negocios en regla y pueden ejercer la actividad en igualdad de condiciones para todos". Igualmente, ha asegurado que en esta legislatura todavía no se ha sancionado a ningún hostelero por estos asuntos, ofreciendo el tiempo necesario para que se adapten a una ordenanza que entró en vigor en 2013. "Lo que sí está claro es que se tienen que adaptar porque de no ser así sería injusto para los que sí han hecho la remodelación", asegura.
No obstante, Gil Mira ha asegurado que "el Gobierno local sigue abierto al diálogo y que si hay alguna propuesta de técnicos externos al Ayuntamiento que garantice que es posible utilizar otras medidas no habría problema en presentar la propuesta de modificación de la ordenanza, algo que ya saben desde la Asociación de Hosteleros. Pero mientras no sea así nuestro deber es velar por la seguridad y los intereses de todos los jumillanos".
Evolución de la ordenanza
La ordenanza se puso en vigor en enero del 2013, donde ya se especificaba la distancia de 1,50 metros entre pilares de las vallas, sin que haya manifestación verbal o escrita de no estar de acuerdo por parte de la asociación. En marzo de 2015 se aprueba una modificación que incluía la altura de toldos y carpas entre 3,20 y 4 metros, por prescripción técnica para cumplir con la normativa del Plan General de Ordenación de Jumilla y evitar que las carpas suban por encima del primer piso de viviendas.
En junio del 2016 la Asociación de Hosteleros presenta un borrador que es estudiado por los técnicos municipales y en la que se contemplaban modificaciones "que hubiesen supuesto un gran problema para los hosteleros, como volver a desmontar las terrazas todas las noches, siendo la nuestra mucho más flexible, siendo la modificación de las medidas la única intención de modificación", indica Juan Gil. "En una reunión se les traslada el informe técnico sobre la propuesta, ante nuestra sorpresa nos muestran el total desconocimiento de la misma por todos ellos, excepto los dos representantes de la asociación que fueron quienes la presentaron, aclarando que ninguna de las dos personas tienen actividad en este sector". El 13 de septiembre del 2016, IU-LV presenta un escrito de modificación, en el que se plantea la modificación de las medidas. Se lleva a comisión y con el informe técnico correspondiente, todos los grupos políticos consideran que la modificación no es posible, porque no se ajusta a ley.
Sobre el comunicado
En relación a las afirmaciones realizadas en el comunicado de la Asociación de Hosteleros, el concejal de Economía ha señalado que "la ordenanza no se ha modificado en ningún sentido de agravio y es la misma que en la legislatura anterior". Por otra parte, ha resaltado que "los técnicos están para que se cumpla con las medidas de seguridad, con el mismo rasero para todos. Todas las solicitudes se tratan de la misma manera y lo que varía es la singularidad del local. Incluso algunos municipios se pusieron en contacto para utilizar esta misma ordenanza".
Por último, ha añadido que "el comunicado dice que el colectivo se siente perseguido, lo que es incierto cuando fueron ellos mismos los que presentaron en su momento la propuesta que se recogió en la ordenanza".