El Gobierno regional acaba de hacer entrega al Ayuntamiento de Jumilla de la nueva estación de transferencia de residuos domésticos que supone un ahorro en los costes de gestión y una mejora en el tratamiento de la basura depositada en los contenedores destinados a los desechos orgánicos.

El director general de Medio Ambiente, Juan Madrigal, indicó que "el sistema de recogida y tratamiento de residuos domésticos de los municipios atendidos por el Consorcio de Residuos Sólidos Urbanos de la Región de Murcia da un paso más con esta nueva estación con importantes mejoras ambientales y que facilita el trabajo de tratamiento que se desarrolla en la planta de Ulea".

En total, la obra acometida ha supuesto una inversión de 1.258.000 euros, cofinanciados con Fondos de Cohesión de la Unión Europea, y su ejecución y puesta en funcionamiento forma parte de las actuaciones del Plan de Residuos de la Región de Murcia 2016-2020.

"Esta infraestructura, ubicada en el emplazamiento de la antigua planta de tratamiento de residuos de Jumilla, permitirá reducir el volumen de los residuos recogidos en el municipio, mediante su compactación, y transportarlos en vehículos específicos a las plantas de tratamiento públicas para su correcta gestión", puntualizó Madrigal.

La nueva estación recibirá residuos domésticos procedentes del contenedor gris, que en Jumilla supera las 8.300 toneladas al año, y residuos recogidos separadamente, como los envases ligeros, procedentes del contenedor amarillo, que el pasado año en el municipio fueron de 79,9 toneladas.

Esta estación de transferencia de residuos será clave para la rebaja de los costes de la gestión de residuos domésticos, ya que posibilitará la compactación de los residuos y optimizar su transporte, con el consecuente ahorro económico en la logística de su gestión, así como las mejoras ambientales derivadas de la reducción de los traslados, es decir, reduciendo la huella ambiental de dicha gestión.

El proyecto

La ejecución del proyecto supuso obras de adecuación del terreno, para conseguir las mejores condiciones de cara a las maniobras que deben realizar los camiones de recogida de residuos municipales. Los residuos se depositarán en una tolva de 30 metros cúbicos, para compactarlos en una prensa, reduciendo el volumen de los residuos a transportar con destino a la planta de tratamiento de residuos domésticos.

También se ha habilitado una zona para facilitar la maniobra de carga y descarga de los contenedores de residuos, una vez compactados. De esta forma, la urbanización final queda estandarizada de forma similar al resto de estaciones de transferencia de la Región, con la particularidad de que incluye unas cubiertas a modo de marquesinas, que mejorarán la reducción del lixiviado producido en este tipo de plantas.

Las cubiertas de la estación de transferencia, que suman 380 metros cuadrados, fueron instaladas en las zonas susceptibles de producción de lixiviados como el aparcamiento de contenedores, la zona de descarga de materias y el módulo de traslación de contenedores. "De este modo, los lixiviados producidos por el contenido de residuos orgánicos en el interior de los contenedores quedan totalmente confinados y no expuestos a las condiciones climatológicas de la zona, por lo que se evita que estos se generen en momentos de lluvia", aseguró el director general de Medio Ambiente.

La nueva planta cuenta con las instalaciones necesarias para poder ser integrada dentro del proyecto de 'Control de entradas y salidas de las instalaciones públicas (CESIP)'. Para ello, han sido instaladas junto con la báscula de pesaje, barreras y cámaras de vídeo-vigilancia, para realizar el control de accesos.